Hoy hablaremos de otra necesidad y objeto totalmente generalizados: Escurrir la vajilla, y los consabidos escurridores. Hay escurridores para platos, para cubiertos, y para platos y cubiertos. Son objetos tan comunes, tan triviales, que la mayoría de la gente los compra en cualquier bazar barato. Y como suele suceder con tantos otros objetos, muchos adquirientes no analizan la necesidad para comprar el mas apropiado. Admitámoslo: no toda la culpa es de los diseñadores, muchos objetos cumplirán bien su función, si se utilizan en el lugar y de la forma adecuados. Hay una característica que podría separarlos en dos grupos: los que acumulan el agua escurrida, y los que no. ¿Y por qué alguien querría un escurridor que no junta el agua ? (se podría preguntar). Pues, porque como ocurre con muchos otros problemas en la vida: a veces es mejor dejarlo correr. El objetivo, la necesidad a cubrir, no es juntar el agua sino secar la vajilla. Hoy en día están generalizadas las mesadas de cocina de ac
Analizaré ahora la distribución del baño en conjunto. Como he dicho en otras ocasiones, el baño es un espacio particular de la casa: por un lado, la mayoría de los elementos del baño están fijos, por lo que la decisión inicial de su colocación no es en absoluto trivial, permanecerá durante muchos años (quizás toda la existencia de la vivienda), y condicionará el uso que se le dé a ese espacio. Por otro lado es el lugar mas íntimo de la casa y el usuario se encontrará en las circunstancias mas vulnerables: estará desnudo, tendrá los pantalones bajados hasta los tobillos, estará descalzo, mojado, etc. Incluso puede que sea compartido por dos personas en esas mismas condiciones. Y como siempre, analizaré un caso concreto: el del baño que me toca utilizar. Se trata de un espacio amplio, de 1,92m x 3,10m. En uno de sus lados menores se encuentra la puerta, centrada en la pared, y en el otro hay una ventana de 1,20m. En una de las paredes mayores sobresale una columna, y arriba también una v